Sábado 27 de febrero, 15:40 horas. Terminando de comer en el Wok. Atestado de gente.
Terminamos de comer, vamos a pagar y en la mesa al lado de donde se paga un matrimonio de unos 50 y pocos con su hija. Ya le había medio montado un pollo a uno de los encargados, y gracias a sus aspavientos nos habíamos enterado medio resturante. Veo que se le ha caído la chaqueta, así que mientras pagamos, se lo digo.
- Disculpe, se le ha caído la chaqueta. (al tiempo que se la recojo del suelo).
- (Se levanta como un resorte) Ay, muchas gracias.
La coge, y delante mía, sin ponerse colorao, empieza a meter las manos en los bolsillos mirándome, no fuera a ser que me escapara.
Luna, a lo lejos mirando y pagando. Yo, con cara de circunstancias, esperando a que el señor terminara de mirar todos los bolsillos y me dejara de mirar como si fuera una ratera.
- Si es que esto te pasa por ser buena, se lo tenías que haber pisado.
Para que luego digan de la educación de los jóvenes de ahora...
Hace 1 año
2 comentarios:
Debió pensar el ladrón que todos eran de su condición, y posiblemente el personaje no joven de está historia si te hubiera "mirado" a ti en los bolsillos ...
jeje, se creería que le habías metido droga en los bolsillos... jajajaaja eso sería mucha suerte!! jijiji
un beso, monstru!
mariachinchu
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